PORTIS, ANTOINETTE "No es una caja"
Factoría K de libros, 2008

A simple vista parece que tenemos una caja de cartón más entre otras. Yo siempre he pensado que los cuentos son como las cajas, dentro nos espera un misterio sin desvelar hasta abrirla. Luego, aunque sepamos ya lo que contiene, sigue existiendo una pizca de misterio al volverla a abrir.
Cuando hablamos de cajas ya más grandes, sabemos que es el mejor juguete que uno puede tener. Y es que la potencialidad de semejante objeto no pasa desapercibido para el conejito que nos presenta Portis. Página a página y sin ornamentos superfluos, nos descubre como este objeto se convierte una y otra vez en cualquier cosa que podamos desear.

Si estamos pensando en un taller de experimentación de cajas, como los que usualmente se hacen en las escuelas infantiles, este es vuestro álbum. Podemos introducir la actividad con él, o usarlo para iniciar el diálogo después, invitando a comentar que era nuestra caja.

OLDLAND, NICHOLAS "L´ós que abraçava els arbres" Ed. Símbol, 2010

Este ha sido hoy uno de los libros contados en las visitas escolares del Petits! Grans! Libres! en Sant Cugat. 

Dar abrazos, pero no abrazos de mosca, sino grandes abrazos de oso, fuertes y calentitos, nos divierte y siempre es un buen pretexto para sentir al que tenemos cerca. 

Así lo hace este oso peculiar que tiene la extraña "manía" de abrazar a todo ser viviente, aunque lo que más le gusta abrazar son los árboles. Pero un buen día un cazador llega al bosque para talar uno de los árboles más grandes y bellos del lugar. Es entonces cuando el gran oso siente una extraña sensación que le impulsa a atacar... Pero el oso lo gestionará como mejor sabe. 

Es uno de esos libros a partir de los cuales podemos hablar de lo que nos hace sentir bien y lo que nos hace enfadarnos y que hacemos entonces. Lo que ahora llamamos "gestión emocional". 

"Quino y la mosca" texto de Enric Larreula y ilustraciones de Francesc Rovira. Ed. Teide.
Quino duerme tranquilamente cuando una mosca entra por la ventana y aterriza en su frente. Página a página las ilustraciones nos acompañan en el recorrido que la mosca hace por toda la cara.
Si pintamos unos ojitos en el índice, podemos seguir entre todos las aventuras de la mosca, tocando suavemente nuestra cara o la del compañero. Ideal para explicar en escuela infantil y parvulario.

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